La Ciudad de Buenos Aires se sigue renovando y la Comuna 13 no se queda atrás. En este contexto, una buena noticia para todos los vecinos y vecinas es que hace unos días comenzó la puesta en valor de  Plaza Ramírez, ubicada en la calle Moldes entre Manuela Pedraza y Tamborini. 

A la hora de repasar que incluye estas diversas intervenciones, se destaca el cambio de mobiliario, es decir bancos y cestos papeleros; creación de espacios de estar; nuevo paisajismo; mejoras en todos sus caminos internos, cuestión que garantiza el correcto paseo por la plaza de personas con discapacidad, adultos mayores, como así también, el paseo de bebes en cochecitos. 

Para tranquilidad de padres y madres, se renovará por completo su patio de juegos,  para dar nueva diversión a los chicos y chicas del barrio de Núñez. 

Se trata de un trabajo que incluye beneficios para el disfrute de todos los vecinos y las vecinas de la Comuna 13.

En este proyecto planificado y ejecutado por la gestión del a presidenta comunal Florencia Scavino, permitiendo identificar claramente los ejes de trabajo que defiende, dando lugar a un modo de encarar la gestión pública que se ha transformado en una marca personal.

Se está dando respuesta a las demandas vecinales, a partir de una planificación transversal e integradora del territorio, pensando cada espacio verde como parte de un todo y de este modo entenderlo en conjunto con su entorno, y por otro lado lograr que cada espacio de la comuna sea concebido desde un eje inclusivo para personas con discapacidad,  niños/as, y adultos/as mayores.

En este sentido, desde el inicio de la gestión de Florencia Scavino en la Comuna, en 2019, se ha defendido, como bandera, el poder pensar el espacio público con  perspectiva de género. 

Es decir, trabajar para poder garantizar que cada lugar sea un lugar por donde las mujeres no se sientan amenazadas al transitarlo y ninguna vecina elija evitarlos por miedo a vivir situación donde su integridad se pueda ver vulnerada. 

Por todo esto, se destaca lo que sucederá en Plaza Ramírez, otra prueba del mencionado compromiso asumido, cambiando el diseño de un espacio que no invitaba a ser transitado con seguridad a otro que se podrá disfrutar en familia.