Graciela Lois, referente de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, pidió hoy que el Gobierno porteño "explique si hay desidia, ineficacia o corrupción" en las obras que realiza en la Ciudad de Buenos Aires, tras haber denunciado la pérdida de la visión de un ojo como consecuencia de una caída sufrida en la vía pública.
"Denuncié en una Comisaría al gobierno porteño, y en pocos días haré una presentación en la justicia por la pérdida de la visión del ojo derecho luego de que me explotara el globo ocular por la caída que tuve cuando caminaba sobre la senda peatonal. Trastabillé con una tapa hundida, en la misma senda", contó Lois en declaraciones periodísticas.
La mujer se incorporó a la militancia en derechos humanos tras el secuestro y desaparición de su marido Ricardo Lois en la última dictadura cívico militar, y presentará la demanda contra la Ciudad de Buenos Aires "porque caminar" por las calles del distrito "y en especial, en la zona sur, es una aventura donde te puede pasar cualquier cosa, como lo que me ocurrió a mi", manifestó.
Su caída ocurrió "mientras caminaba por la senda peatonal donde había una tapa hundida", contó al referirse al hecho ocurrido en la intersección de la avenida Almirante Brown a la altura de Villafañe, en el barrio de La Boca.
El hecho ocurrió el 30 de diciembre pasado por la mañana cuando volvía a su casa, tras hacer unas compras.
"Me operaron de inmediato y me informaron que no iba a recuperar la visión del ojo, a lo cual le siguió otra intervención a la semana siguiente", indicó.
El 3 de enero, se presentó en la comisaría vecinal 4C para denunciar lo sucedido y le brindó información a la Policía de la Ciudad sobre dónde están las cámaras que acreditan lo que le ocurrió, al tiempo que contó a esta agencia que cuenta con "pruebas fotográficas sobre el estado de las calles".
En especial, explicó que "el desastre por el que tenemos que circular los peatones en mi barrio comienza en la calle Benito Pérez Galdós, sobre Almirante Braun y continúa hasta el Parque Lezama".
"También se extiende por la avenida Paseo Colón que es otro desastre donde nunca se termina de arreglar. Las calles circundantes al hospital Argerich, siempre están cortadas y es una vergüenza ver como las ambulancias no puedan abrirse paso con rapidez para llegar. Tardaron un año para hacer ocho cuadras y además dejan los escombros y la basura tirada, lo cual aumenta la posibilidad de accidentes", detalló.
Lois relató que al momento de la caída "sentí un dolor muy fuerte en la cabeza, en la parte de atrás como si me hubieran hundido el cráneo. Luego me explicaron que hay conexiones en la vista que llegan directamente al cerebro".
En la actualidad, Lois trabaja en la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, donde está a cargo de la coordinación operativa de Derechos Humanos.
La mujer se incorporó a la militancia en derechos humanos luego de que el 7 de noviembre de 1976 secuestraran a su marido, y junto a su hija María Victoria y a Laura Bonaparte, Madre de Plaza de Mayo, impidieron - una vez retornada la democracia- que el gobierno de Carlos Menem demoliera la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) mediante la presentación de un amparo en la justicia.